Hola de nuevo a todos.
Fijándonos en la foto nos vienen a la cabeza palabras como imposible, futurístico ó fantasmada. Pero no, el Hyperloop es una realidad, de hecho la empresa HTT ha firmado un acuerdo para fabricar en California en el año 2016 una vía de unos 8 kilómetros que servirá como prueba piloto.
Para todos los que estéis leyendo la entrada y os preguntéis de que estoy hablando, el Hyperloop es un sistema de transporte que utiliza el aire comprimido para mover objetos a través de un tubo que conecta puntos fijos donde se hace el vacío y por el que viajarían ‘trenesbalas’ a gran velocidad por la ausencia de rozamiento.Este proyecto aparentemente irreal es obra de Elon Musk, más conocido por ser co-fundador de Pay-Pal y Tesla Motors; así que visto el éxito de este personaje podemos pensar que este medio de transporte es el futuro.
Esto supondría la mayor revolución en el transporte desde la creación de la máquina de vapor, estamos hablando de que se podrían transportar mercancías a una velocidad de 1000 km/h (pese a que el proyecto demo sito en California únicamente alcanzará los 300 km/h).Sin embargo, existe una gran pega, el coste, el cual para que nos hagamos una idea de las desorbitadas cifras que se manejan, únicamente la construcción de estos 8 km rondaría los 100 millones de dólares.
Por último, cabría explicar el funcionamiento del Hyperloop, este se autoabastecería de la energía aportada por los paneles solares que se instalarían en la cubierta del tubo-túnel. De esta manera se generaría más energía que la que se consumiría en el sistema siendo posible almacenar la energía de tal modo que funcionase las 24 horas del día sin necesidad de baterías.
Grupo F - Transporte y Logistica Internacional 
Hola David!
Muy interesante tu entrada en el blog.
Me gustaría hacer un pequeño comentarío al respecto. A priori, el proyecto que comentas parece muy interesante pero le veo una grave debilidad.
A velocidades tan altas lo interesante y donde realmente se pueden experimentar grandes mejorías es en las largas distancias (1.000 km en una hora, Wow!). No creo que en distancias cortas la reducción en tiempos se vea compensada por la movilidad de los medios actuales (Camión hasta la puerta de la fábrica por ejemplo) o el elevado coste esperado.
Sin embargo, a día de hoy (y probablemente en el medio plazo) no es viable realizar una instalación de 1.000 kms de «tubo» de ese tamaño, como has indicado, por prácticamente ningún área geográfica del mundo, ya sea debido a las condiciones del terreno (¿Cómo pasaría por ejemplo los Pirineos?) o por cuestiones políticas (¿Se pondrían deacuerdo los EEUU y China en construir un tunel así por medio del océano Pacífico?). ¿Cúal sería su impacto ambiental?
Es siempre interesante observar este tipo de innovaciones ya que es la única forma de progresar como sociedad, pero me temo que por el momento es más factible que se mejore la eficiencia de los actuales medios de transporte antes de crear Hyperloop.
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Muy interesante tu aportación sobre el Hiperloop. Recuerda a varias innovaciones que se realizaron previamente en materia de transporte. Si nos remontamos al año 2002, hace ya 13 años, se inauguraba el primer tren de levitación magnética en China, concretamente en Shangai. En este caso, su uso quedaba muy restringido al comunicar tan solo el trayecto con la ciudad en un trayecto que no superaba los 10 km. No obstante, supuso una gran innovación para la época dado que se introducía por primera vez este tipo de tecnología que permitía desplazarse a más de 400 km/h. El proyecto fue financiado con tecnología alemana, siendo la empresa Siemens y Thyssen Group dos de los accionistas mayoritarios. Posteriormente, tras el éxito del » Transrapid», en 2005, tan solo tres años después, se lanzaba en China un segundo modelo de tren de levitación magnética, el ‘Zhonghua VI’ que desafiaba aún las leyes de la gravedad al tener las vías situadas en la parte superior y por tanto estar literalmente suspendido en el aire. Este nuevo proyecto supuso una gran inversión, de alrededor de 1000 millones de dolares, aunque de nuevo se encontraba con el mismo obstáculo: su elevado coste, que impedía un uso recurrente por parte de los usuarios. Más recientemente en Japón, en el año 2014 se lanzaba un nuevo tren de levitación magnética, esta vez en un trayecto de 42 km entre Uenohara y Fuefuki. En esta ocasión se trataba de un proyecto piloto con el objeto de realizar las pruebas necesarios para ponerlo en circulación en 2027 para comunicar la ciudades de Tokyo y Osaka. Dicho tren permitía recorrer velocidades de más de 500 km/ hora.
Todos estos ejemplos, son muestras claras de innovación en el transporte, y pese a estar en muchos casos en fase de prueba será una forma ágil de facilitar el transporte de pasajeros. El principal impedimento para su desarrollo sigue siendo su elevado coste y su aplicación en el transporte de mercancías. De momento no resulta factible porque la mayor parte de la energía se dedica a vencer la resistencia del aire y no para la suspensión. Habrá que esperar para que dicha tecnología sea apta para el transporte de mercancías.
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